Hace ya unos años tuvimos la suerte de poder escalar. Este auténtico obelisco ofrecía una escalada de genio (6c sin posibilidad de asegurarse) o de ingenio. Nosotros optamos por lo segundo y conseguimos una de las escaladas más alucinantes de nuestras vidas. Para quien anda un poco perdido venía a ser el clocher de l'Aiguille du Midi, en otras palabras, la celebre portada del libro de Rébuffat de las 100 mejores ascensiones del macizo del Mont Blanc.
Y digo venía a ser porque hoy mientras subía la Rebuffat he descubierto que ha desaparecido. Parece ser que el pasado otoño cayó hasta el glaciar.