OJO Ermita Redovan

Este mensaje sigue al publicado primeramente por JordiA0 en el foro de escalada deportiva.

Éramos cuatro en la furgo. Imaginaos durmiendo plácidamente, tan tranquilos.
Cuando de repente, a las 03:30 de la madrugada, te despiertas oyendo los impactos de laS piedraS contra el cristal. Y tú dentro, en cualquier caso, indefenso, en bolas (nunca mejor dicho). Se dice rápido…Pero imagínate que te despiertan con un puñetazo en la cara.
Entonces te levantas, te sientas y ves una piedra al lado de tu cojín y cristales alrededor. O sea, pura leche, bendito ángel de la guarda y alabado el tío (evidentemente alemán) que ideó las cortinitas de atrás de la volskswagen (cogidas tanto de arriba como de abajo, lo que permitió que hicieran de parapeto, cayendo la piedra con menos fuerza dentro de la furgo).

Es decir:
1. Lo de menos: la furgo (ya sé que igual pensáis que “qué sobrada” o “qué pija”, pero ante la posibilidad de que me hubieran abierto la cabeza, la verdad, una luna y un retrovisor no me afectan tanto).
2. Lo de más: ser objeto de violencia total y absolutamente gratuita. ¿¿¿¿POR QUÉ????? No habíamos hecho ningún mal, de hecho éramos los más discretos en el rellano de la ermita. Y ni ensuciamos ni nada, de nada. Está claro que en este país no se puede ni dormir tranquilo. No hace falta ni provocar.

Total, sabed para vuestro bien que almenos en la ermita de REDOVAN alguien se dedica no simplemente a “petar” furgos, sino a apedrearlas directamente con gente dentro. Cafre total. Me parece increíble que a alguien le parezca divertido. O que utilice estas formas para alejar a la peña. Y todavía más que salga impune. Ni que decir tiene que yo a partir de ahora dormiré con un bate de béisbol dentro del saco.

Un saludo especial a la policía local de Redován (en especial a Emilio y Paco), que se portaron de maravilla con nosotros.