¡Un simple tirón con la mano no es nada!
Hay que examinarlos minuciosamente, primero la roca, si el lugar dónde están emplazados los pitones es fiable, firme y seguro, después el estado de los pitones (corrosión, fisuras en el pitón...) y por último la firmeza de estos cuya fiabilidad sólo se puede valorar mediante la experiencia (por ejemplo si se practica la escalada artificial es bastante fácil llegar a saber la fiabilidad de un seguro).
De todos modos en el accidente que comentas los pitones fueron emplazados por ellos mismos.